Asumiendo que las 6000 muestras son representativas del pueblo Awajun, 114 casos de infección por VIH representaría el 1.9% de la muestra. Ciertamente esta cifra es mayor que las prevalencias de estudios epidemiológicos realizados anteriormente en otros grupos étnicos amazónicos (alrededor al 1 %) pero está lejos de lo que prensa quisiera para vender: que el SIDA esta “desapareciéndolos”. En un estudio realizado el 2010, encontramos 3 de 307 mujeres shipibas (0.97%). Una falleció sin TARGA y las otras dos aún no pueden entrar a TARGA, a pesar que viven cerca a hospitales donde hay infectólogos y medicación antiretroviral gratuita. Estoy completamente seguro que esta situación está pasando con otros grupos étnicos y en mayor medida entre indígenas homosexuales que se han visto obligados a migrar por ser homosexuales y que pueden estar viviendo en ciudades como Chiclayo, Lima, Pucallpa, Bagua, etc. Como lo dije anteriormente, nos sorprendería saber que esto también está pasando con los indígenas migrantes que viven en Lima, cerca palacio de gobierno y al ministerio de salud. La prensa con su fijación solo en los Awajun (antes fueron los Shawi, en un futuro talvez los Shipibo) hace que perdamos la perspectiva del problema real, que pensemos que los Awajun son los únicos afectados por el VIH, que todos los casos están remotamente lejos, que la solución recae en tener más infectólogos y tratamientos. Es un problema es mucho más complejo que eso.